
Como un niño, jugaré con mi sombra
sobre la arena pálida.
Jugaré con la sombra de mis dedos
dibujando figuras sobre el agua,
al borde de la fuente, detenida.
Jugaré a perseguirme por las gradas
donde bailan las hojas del otoño,
e iré llamándome en distintas voces
para escuchar que el viento me responde.
Eliana Navarro